Un viaje al pasado, al presente y al futuro. Ante nuestros ojos la línea del horizonte permanece como metáfora de aquello que ambicionamos alcanzar y, por ser una quimera, cuando parece al alcance de la mano se desvanece, cual espejismo, para volverse de nuevo a mostrar… inasequible en su lejanía.
En nuestro avance hacia esa ilusión de poder, gloria y eternidad, vamos dejando, tras nuestras huellas, una estela de muerte y destrucción. Demasiado tarde, quizás, caemos en la cuenta de que lo verdaderamente hermoso es lo que hemos abandonado a nuestra espalda pero… apenas tenemos tiempo ni fuerza de volver sobre nuestros pasos… ese ansiado “El dorado” es un desierto cuyas arenas, inexorablemente, se escapan de nuestras manos.
Luz y Calor (Manuel Moreno)
Enhorabuena a todos y todas las que estáis participando en esta belleza de exposición. Espero poder tener un hueco y acercarme a verla "in situ". Saludos
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